REFLEXIONES DEL PADRE JUAN

AMA Y DERROTA LO QUE QUIERAS

 

Las culpas, los dolores, las angustias y las tristezas nunca podrán ser más grandes que el amor. Solo son la puerta que conducen al amor. Solas no tienen razón de ser, pues son amargas situaciones que nos revelan como seres limitados, haciéndonos sentir vacíos de la vastedad que solo Dios concede: el amor.