REFLEXIONES DEL PADRE JUAN

¿CIEGO YO?

 

Fui ciego de nacimiento y cuando tuve la gracia de ver por primera vez, me di cuenta que la ceguera no era mi aflicción. Me percaté que había personas mas ciegas que yo, pues sus corazones les impedían ver el milagro que mi señor hizo conmigo. Gracias Señor porque mi imposibilidad me enseño a valorar lo que es la esperanza. Así eres tu señor, solo te basta un segundo para llegar a lo más profundo de mí ser.