Objetivo:
Acompañar humana y sacramentalmente a los enfermos y a quienes les ayudan para fortalecer en ellos la fe, la esperanza y la caridad.

Misión:
Es el encuentro con el enfermo, su familia, con los profesionales de la salud, con las estructuras de salud y con los sanos, para potenciar una cultura más humana y cristiana frente a la defensa de la vida, a la discapacidad, al dolor, al sufrimiento, a la agonía, a la muerte y al duelo.