NUESTRA SEÑORA DE LA LUZ
Aleja de mi todo peligro, guárdame Señora, y todos los días de mi vida recíbeme por tuyo, yo estaré, Señora, a tus santísimos pies, yo daré a mi corazón la dicha de saludarte, y yo renovare el amor que desde hoy te ofrezco.
Dios te salve…
Dulce Madre….