Miércoles 11 de marzo de 2020
Señor limpia mi corazón y mis ojos, borra de mi cualquier trazo de orgullo y envidia, no permitas que en mi corazón se albergue ningún sentimiento negativo. Señor que este tiempo de cuaresma sea realmente de conversión, que sepa aprovechar los diversos momentos para elevar mi mirada a ti y ofrecerte cada una de mis acciones por pequeña que sea para que tu crezcas en mi corazón y yo disminuya, Amén. (Pbro. Tavo).