Buenos días Señor, gracias por este nuevo día, por esta nueva semana que ha iniciado. Al contemplar el horizonte de esta semana se vislumbra un sin número de actividades a realizar, de pendientes a resolver. Dame la gracia que no me deje llevar por el activismo, que sepa mantener mi mirada puesta en ti, que en medio de mis mil afanes sepa siempre tenerte presente a ti Señor y busque en todo momento dejar de alguna u otra forma tu mensaje, tu enseñanza. Dame la gracia Señor de saber llevar tu mensaje, de transmitir tu mandamiento nuevo a través de mis palabras, de mis actitudes, de mis acciones. No permitas Señor que la indiferencia, la arrogancia o la pereza me impidan vivir con autenticidad mi fe católica, que no olvide que estamos de paso, que hay que vivir la vida plenamente. Hoy es el día que tengo, el ayer ya está en tus manos, el mañana no se si lo tendré, por eso te pido que me ayudes a vivir bien este día que has regalado, que me empeñe por hacer el mayor bien posible y poder construir un peldaño más de mi escalera al cielo. ¡El Señor es mi pastor, nada me falta! Amén. (Pbro. Tavo).