Al iniciar este nuevo día busco un momento de silencio para conversar contigo Señor, para agradecerte por esta nueva oportunidad, para pedirte por mi familia, amigos y enfermos, por mi trabajo y para poner en tus manos todas las actividades de este día. Tú me conoces bien Señor, sabes cuales son mis preocupaciones y mis penas, mis alegrías y gozos, todo lo pongo en tus manos. Transforma Señor mi corazón, dame la gracia de saber vaciarme de mí y llenarme de ti, de dejar de pensar solo en mi para que a través de ti piense y sirva a mis hermanos. Que no tenga miedo Señor de acercarme a ti, sé muy bien que los cambios cuestan, y a pesar de saber que es necesario cambiar no siempre se está dispuesto, quizá por egoísmo o comodísimo, quizá por orgullo o superficialidad. ¡Haz la prueba y verás que bueno es el Señor, grandes son sus obras! Hoy es el día, ayúdame Señor, dame fuerza para abrir de par en par mi corazón, envía tu fuego purificador, borra todo tipo de egoísmo, soberbia y vanidad. Dame tu gracia para saber escuchar tu voz y con humildad dejarme guiar. Solo por hoy, un día a la vez. Aquí estoy Señor, habla que tu siervo escucha. Me pongo en tus manos, inicio este día con el deseo de vivirlo plenamente, dame la gracia de que todas mis palabras, acciones y actitudes sean de tu agrado y me ayuden a estar al final del día más cerca de ti. En tu nombre me pongo en camino, Amén. (Pbro. Tavo).
ORACIÓN DE LA MAÑANA
MATERIAL PARA DESCARGAR
Suscríbete a nuestro boletín semanal
Suscríbete y recibirás en tu correo la Oración de la mañana, homilías, noticias y eventos de la Diócesis de Piedras Negras